Una buena forma para proteger la madera del agua es cubrirla con un buen sellador o fijador. Por lo general estos selladores de madera proporcionan una capa protectora para la superficie, la cual no permite que diversas sustancias, incluyendo el agua, entren en contacto con la madera, sino con el sellador. Si bien la mayoría de los muebles de madera vienen con sellador, puede que desee volver a aplicar una capa cada año. Al hacer esto, usted tendrá garantizada la seguridad de la superficie de madera mientras que a su vez la mantiene brillante y como nueva. Además, usted podrá usar un limpiador de madera a base de aceite para limpiar estas superficies y evitar aún más que el agua las penetre.
Otra buena forma de proteger la madera del agua, en particular la madera que se usa para las mesas o escritorios, es colocar una lamina gruesa de vidrio o plástico acrílico sobre la misma. Muchos encuentran bastante atractiva esta forma para proteger la madera, ya que le agrega un efecto al mueble al complementar las texturas ricas y las ventas de las superficies de madera. Además, se asegura de que la madera no entre en contacto con el agua, siempre y cuando el vidrio o plástico acrílico se mantenga intacto.
Así como nos gastamos tiempo y esfuerzo para elegir el color, textura y patrón de la madera, es importante hacer lo posible para preservar el aspecto de la misma. Tome las medidas necesarias para proteger la madera y muebles del daño que puede ocasionar el agua, y sus cosas se verán como nuevas.